Reforestation for Conservation
Photo: Fernando Arbeláez
This project was finalist of the Ventures 2007 contest
Ciénaga de Barbacoas y futura reserva forestal “Barbacoas”. Fotografía: Silvia Vejarano
Presentación
Reforestación para Conservación es un proyecto productivo sostenible y rentable en el largo plazo que procura la conservación del bosque húmedo del Magdalena medio, paralelamente a la creación de alternativas de desarrollo sostenible y de mejoramiento de las condiciones sociales para la población local. A la vez, el proyecto está diseñado para volverse autosostenible, ser continuamente expandible, tener impactos sociales y ambientales inmediatos y crecientes, y garantizar la operación de una reserva en la zona, la autosuficiencia de la fundación en el tiempo y la expansión de sus programas de conservación y de desarrollo social.
Ciénaga de Barbacoas y futura reserva forestal “Barbacoas”. Fotografía: Silvia Vejarano
Localización
El proyecto se localizará en el Magdalena medio antioqueño, en el caserío de Barbacoas, municipio de Yondó. Esta zona se caracteriza por sus bosques húmedos tropicales de invaluable riqueza y en grave peligro de desaparecer debido a la expansión de la ganadería, y por las condiciones de pobreza y abandono social de su población local: carecen de salud básica, de seguridad alimentaria, de centros de educación, de servicios públicos y sanitarios elementales, y de alternativas de desarrollo sostenible.
Localización del municipio de Yondó, Antioquia (click para ampliar)
Localización del lugar de implementación del proyecto (click para ampliar)
Descripción del proyecto
Sistema forestal
En los potreros y rastrojos aledaños a un área de bosque silvestre protegido se establecerá un sistema agroforestal que combina varias especies nativas de madera fina, maderas intermedias y caucho, en bajas densidades y simulando las condiciones ecológicas propias de los bosques naturales. Las maderas finas serán cosechadas a los 25 años y generarán los principales ingresos al proyecto. Las maderas intermedias y el caucho permitirán el sostenimiento del proyecto en menor plazo: el caucho comenzará a producir continuamente a partir de los cinco años y las maderas intermedias, en dos ciclos de 12 años. Se realizará un manejo silvícola que permita la regeneración natural del bosque y el aumento de la biodiversidad en las áreas reforestadas. Luego de la cosecha de maderas finas, dichas áreas se habrán convertido en un bosque secundario con un considerable aumento en su biodiversidad, y la mayor parte será destinada para conservación. Otro porcentaje del área será destinado para protección/producción y continuará generando ingresos permanentes en el largo plazo, después de los 25 años. La presencia del bosque maduro en cercanías de las zonas reforestadas es fundamental, ya que proporciona una fuente importante de control biológico de plagas para las especies cultivadas. Debido a las altas tasas de explotación y de deforestación de los bosques tropicales, la siembra de maderas finas tropicales es una de las alternativas más rentables para su conservación, dado que su mercado internacional y sus altos precios estarán asegurados en el futuro, especialmente si están certificados internacionalmente por su buen manejo ambiental y social. Por otro lado, el caucho tiene un mercado muy promisorio debido a su gran demanda en el mercado nacional e internacional y las maderas intermedias se venden fácilmente para producción de conglomerados.
Suelos degradados por la deforestación para ganadería. Fotografía: Silvia Vejarano
Habitantes del cacerío “Barbacoas”. Fotografía: Silvia Vejarano
Sistema agroecológico
Con el fin de asegurar el mantenimiento y la protección del sistema agroforestal desde el primer año, se destinarán igualmente hectáreas productivas que garantizarán seguridad alimentaria y alternativas económicas sostenibles para las familias campesinas encargadas del cuidado de los árboles. A cada familia guardabosques se asignarán nueve hectáreas reforestadas y una productiva. Para esta hectárea productiva, el proyecto proporcionará insumos y capacitación a las familias para establecer una granja agroecológica autosuficiente, entremezclada con árboles de caucho y de maderas intermedias, y rodeada por árboles de teca como cerco vivo. Las granjas incluirán hortalizas, frutales, vacas, cerdos, gallinas y lombrices y garantizarán la seguridad alimentaria de las familias. Los excedentes de producción serán comercializados localmente y en los centros de acopio de la región mediante una asociación de agricultores creada para tal fin, y generarán ingresos para las familias y para el proyecto a partir del primer año. La primera fase del proyecto consistirá en la vinculación de 10 familias guardabosques y en la compra de 101 hectáreas de potreros y rastrojos circundantes al área de bosque protegido: 90 has. para reforestación, 10 has. productivas y 1 ha. operativa.
Impactos ambientales y sociales
Desde su inicio, el proyecto pretende generar un impacto social importante y creciente con miras a mejorar las condiciones de vida de la población beneficiaria, generando alternativas productivas sostenibles, creando empleos justos permanentes y temporales y garantizando seguridad y calidad alimentaria. Se crearán inicialmente dos proyectos productivos comunitarios complementarios al proyecto para la generación de ingresos adicionales para toda la población: el establecimiento de plantas comunitarias de producción de compost a partir de desechos orgánicos domiciliarios, que el proyecto comprará para la fertilización de los suelos reforestados; y el almacenamiento y comercialización directa del pescado en los centros de acopio de la región por parte de la asociación de pescadores, junto con la concertación de un manejo sostenible del recurso pesquero. En los años de mayores ingresos, se tienen planeados unos montos de reinversión social en la zona que se utilizarán principalmente para la creación de proyectos productivos sostenibles complementarios al proyecto, y para el apoyo y el fortalecimiento el tejido social. Finalmente, el proyecto gestionará con las autoridades regionales y nacionales para el mejoramiento de las condiciones de educación, de salud y de servicios básicos de toda la población de influencia.
En el aspecto ambiental, el proyecto está enfocado a la conservación mediante la generación de alternativas para la población local diferentes a la explotación no sostenible de los recursos naturales. Además, pensamos que el proyecto impulsará un sentido de apropiación y de valoración del bosque por parte de la comunidad. Sus impactos ambientales principales serán: la conservación de la biodiversidad del bosque húmedo del Magdalena medio y de especies únicas y en peligro de extinción; la protección y recuperación de los suelos y de las aguas del bosque y de sus ciénagas aledañas; y la mitigación del cambio climático global y de la explotación de maderas finas en los bosques silvestres tropicales.
Familia del cacerío de Barbacoas. Fotografía: Silvia Vejarano
Conclusión
Presentamos un modelo productivo en reforestación con maderas finas tropicales autosostenible yrentable en el largo plazo, con beneficios sociales y ambientales tangibles, significativos y perdurables en una región que lo necesita con urgencia.
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